Mi humilde petición

Sería de agradecer que cada cual deje sus comentarios en la entrada que crea oportuna...tanto los buenos como los no tan buenos. Así puedo hacerme una idea de cómo mejorar y en qué aspectos :)

domingo, 9 de octubre de 2011

Érase una vez que se era...

Érase una vez que se era,
en una mente muy lejana,
un diminuto ser 
que a los títeres jugaba.
Movía los hilos
una y otra vez,
jugaba con ellos,
los usaba a placer.
Trasteaba a cada lado,
los manejaba sin ton ni son,
los liaba sin pensarlo
y cortaba sin compasión.
Giraba las imágenes,
las llenaba de color…
las vaciaba de coraje,
las llenaba de dolor.
Manejaba con sus dedos
los hilos del amor
sin saber que con sus juegos
creaba confusión.
Divertía-se el personaje,
jugaba lleno de ilusión
machacando ilusiones,
pisoteando a la razón.
Dio-se cuenta con el tiempo
del mal de sus acciones
y de arreglarlas hizo intento,
sin buenas conclusiones.
Mil lágrimas lloró
por un daño mal causado…
y mil veces lamentó
el haberlo provocado.
Lloró y lloró
hasta caer escarmentado,
y sufrió y sufrió
por haberla destrozado.
El temor lo invadía,
la pena lo arrullaba,
y por miedo y cobardía
la cabeza agachaba.
Fue por esto que no pudo ver
que una nueva luz resurgía
y sigue aún sin creer
que el títere muerto, tiene vida.
Jugando y jugando
cegó-se de amor,
destruyó aquella mente,
privó-la de razón…
Mas olvidarse de la pena
la luz le devolvió,
fluyendo miedo por sus venas
la mente resurgió.
Ya no juega el titiritero
con los hilos del amor,
ya no juega, tiene miedo
de sufrir ese dolor.
Alegró-se la criatura
de su mente, de su don,
y usó-lo con cordura,
y la mente se curó.
Érase una vez que se era
un titiritero juguetón
que jugaba con los sueños
y solo se quedó.
Érase una vez que se era
un titiritero luchador
que luchaba por cumplirlos
y al final lo consiguió.
Y colorín coloriendo…
esto un sueño acabó siendo.